
Almeja asiática en el Ebro. Foto: Ismael Sanz.
Un equipo internacional de científicos ha demostrado recientemente que las especies exóticas están expandiendo su área de distribución órdenes de magnitud más rápido que las especies autóctonas. Incluso las plantas, aunque nos pueda parecer que no se mueven, dispersan sus semillas y se desplazan a una velocidad tres veces superior cuando son invasoras respecto a cuando son nativas. La velocidad es importante debido al rápido ritmo del cambio climático. Para sobrevivir, las plantas y los animales necesitan desplazarse 3,25 kilómetros al año sólo para seguir el ritmo del aumento de las temperaturas, una velocidad que las especies no pueden alcanzar sin ayuda humana.
Estos son los principales resultados de una investigación dirigida por científicos de la Universidad de Massachusetts Amherst (UMass Amherst), con Bethany Bradley, como investigadora principal, y un equipo compuesto por investigadores de Nueva Jersey, Michigan, Colorado y Hawai en EE.UU, Zaragoza y Sevilla en España, entre los que se encuentra Belida Gallardo, científica del Instituto Pirenaico de Ecología (IPE-CSIC) y coordinadora del Grupo de Investigación en Restauración Ecológica.
“Sabemos que el número de especies exóticas está aumentando exponencialmente en todo el mundo” dice Belinda Gallardo, investigadora del IPE-CSIC y miembro del equipo de trabajo. “También que muchas especies nativas están desapareciendo a causa del cambio climático, y este estudio lo que pretendía era medir la velocidad de expansión de especies nativas y exóticas para poder anticipar los impactos del cambio climático”.
Para averiguar cómo de rápido se desplazan las especies, el equipo recopiló información acerca de la velocidad a la que se están desplazando más de 6.000 especies autóctonas y exóticas. El ser humano contribuye a acelerar la propagación de las especies exóticas, ya sea accidentalmente, como contaminantes de mercancías o polizón en contenedores comerciales, o intencionadamente, como es el caso de las plantas ornamentales y las mascotas exóticas.
Sabemos que las especies necesitan desplazarse a más de 3,25 kilómetros por año para seguirle el ritmo al cambio climático. Lamentablemente, este estudio concluye que las especies autóctonas consiguen desplazarse a una media de 1,74 kilómetros al año. Por el contrario, las especies exóticas son capaces de dispersarse por sus propios medios a 35 kilómetros al año, una velocidad muy superior a la del cambio climático. Es más, las especies exóticas son capaces de trasladarse miles de kilómetros al año cuando se benefician de actividades humanas, tales como el comercio, el transporte o los deportes.
Escenarios de cambio climático
Además, el estudio demuestra que, bajo escenarios de cambio climático, las especies exóticas tienen áreas de distribución potenciales más grandes y expansiones de distribución más rápidas. Esto se debe a una combinación de múltiples focos de introducción y tolerancias climáticas más amplias. También habrá zonas de contracción, que serán mayores para las especies nativas que para las no nativas. En resumen, las especies exóticas ganan más y pierden menos espacio que las especies autóctonas.
Claramente, con tasas de propagación más rápidas y un mayor potencial para persistir o expandirse, las poblaciones de especies exóticas tienen una ventaja decisiva en un clima cambiante. Esto es preocupante ya que muchas de estas especies causan impactos ambientales y socioeconómicos en los ecosistemas receptores. Belinda Gallardo, científica titular del IPE, dice: «Irónicamente, como sociedad, a menudo nos resistimos a los riesgos asociados con el traslado de especies nativas más allá de sus áreas de distribución en respuesta al cambio climático, mientras movemos alegremente especies no nativas por todo el mundo».
Por parte, la investigadora Montserrat Vilà, añade: «Un mayor enfoque en los mecanismos de propagación nos ayudaría a identificar especies nativas vulnerables y especies no nativas con alto riesgo de expansión con el cambio climático».
Referencia:
Bradley B.A., E.M. Beaury, B. Gallardo, I. Ibáñez, C. Jarnevich, T.L. Morelli, H.R. Sofaer, C.J.B. Sorte and M. Vilà. 2024. Observed and potential range shifts of native and non-native species with climate change. Annual Reviews in Ecology, Evolution and Systematics (in press).
Artículo completo aquí.